top of page
larguillo.png

Reflexiones en torno al sentido del quehacer del arquitecto

  • Foto del escritor: Fanzine Ubicuo
    Fanzine Ubicuo
  • 31 may 2020
  • 4 Min. de lectura

Editorial: Tania Cano

Arquitecta.

____________________________________________________________________



Para este segundo número del fanzine, se invitó a los colaboradores a reflexionar sobre el quehacer del arquitecto(i). Una actividad sobre la que continuamente deseamos, desde el hacer teórico y práctico, conocer más sobre sus límites. Seguramente, muchos consideren que ésta ha sido una pregunta ya abordada desde distintos frentes y argumentos, sin embargo, más allá de saber que esto podría ya haber sido dialogado en otras situaciones y tiempos, tratar esta pregunta en este particular momento, guarda en mi opinión, una especial belleza en su ensamblaje, reconociendo que los últimos meses todos hemos vivido condiciones tan impredecibles como desconocidas, pero que sin duda se volvieron comunes para la mayoría de nosotros.


Creo poder decir, con cierta seguridad, que no ha existido un tiempo en el que, en nuestra generación, hayamos volteado a ver tanto hacia nosotros mismos; hablo de volver a descubrir nuestras marcas, recordar las historias de cada una de nuestras cicatrices, notar aquellas partes de nuestro cuerpo que no volverán a verse como hace 10 años y saber que somos eso y mucho más. Todo esto que parece que no cambia y que, sin embargo, no deja de transformarse con cada minuto, nos devuelve a la pregunta de ¿qué significa vivir una buena vida?, ¿qué significa hoy, vivir una buena vida, desde nuestra compleja profesión? ¿Por qué una buena vida? Y ¿Qué podemos y qué no podemos hacer en este sentido, el gremio de la arquitectura?


Rodeados de familia o en completa soledad, muchos hemos acudido a diario al ejercicio de imaginar, tanto para entender lo que sucede en nosotros mismos y a nuestro alrededor, como para visualizar lo que seguiremos siendo o no, cuando nuestra situación social vuelva, poco a poco, a ser escrita. Lo que antes no notábamos, hoy salta a la vista como nunca. Lo que había permanecido en silencio, hoy ha recuperado o ha ganado una voz.


Y eso es, en parte, lo que encontrarán en esta edición: relatos desde distintas voces, desde distintas ciudades y desde distintos ejercicios de atención e imaginación. Una colección pequeña de recuerdos y sueños; desde el niño que construye castillos de arena, hasta el joven que rodeado de familia sueña con seguir descubriéndose en el ejercicio de crear. Ejercicios de crítica hacia la práctica arquitectónica que señalan preocupaciones, anhelos, y reflejos de la compleja realidad que vivimos la mayoría como habitantes; relatos que, a la par de algunas ilustraciones -con un poco de humor-, complementan esta colección de miradas.


Desde la arquitectura, que ha sido el campo de estudio y acción que elegí desde hace varios años, he dedicado algunas tardes a pensar cómo nuestro actuar en esta disciplina puede perfilar el ejercicio de soñar, de dibujar y de construir nuestros espacios. Marco Frascari nos hablaría del logro de una vita beata(ii), que para él incluiría considerar el arte de construir bien, el arte de vivir bien, el arte de cocinar bien, el arte de dibujar bien y el arte de pensar bien, sin ningún orden aparente en específico. Vita Beata en el sentido de una vida beatífica humana se ha convertido en una noción que podemos referir a varios textos y épocas, sin embargo, caminando de norte a sur en mi azotea, pienso por ahora, en este vivir bien de la mano con otras categorías de “lo bueno”, como lo sugeriría también Richard Sennett en su texto de “El Artesano”, quien nos habla de abrir una nueva página, preguntándonos, “…- ¿Qué nos enseña de nosotros mismos el proceso de producir cosas concretas? Aprender de las cosas requiere preocuparse por las cualidades de las telas o el modo correcto de preparar un pescado; buenos vestido o alimentos bien cocinados pueden habilitarnos para imaginar categorías amplias de “lo bueno.”(iii)


Sennett lo advierte en su cita, y vaya que podemos decir que no han sido simples para ninguno de nosotros; ni las preguntas, ni las respuestas a esto. Pero si algo hemos descubierto y aprendido en estos setenta días, es que mucho de esa nueva página que nos propone este autor, sí está en saber reconocer detalles, desde y hacia cada uno de nosotros, a partir del proceso que empleemos en nuestro hacer, día con día. Desde la preparación del platillo que iremos a comer a media tarde, los productos que usaremos al tomar un baño, la ropa que usaremos, … hasta el proceso del que somos parte como arquitectas y arquitectos.


Lo que me da una especie de pista acerca de que quizá se trata de conciliar la premisa de una buena vida, con varias de las condiciones presentes en nuestro hacer. Será así, en este dialogo, y en el que surja en adelante, que buscaremos construirlo, sin pretender la búsqueda de una respuesta universal, sino siempre teniendo presente el reconocimiento de individualidades y de colectividades, de acuerdos y desacuerdos, en lo que juntos podemos hacer e imaginar.


Tania Cano

Guadalajara, Jal. 31 de mayo de 2020


REFERENCIAS:

i. Usamos de aquí en adelante, el término ‘arquitecto’ considerando en todo momento tanto a arquitectas como a arquitectos.

ii Goffi, F. & Frascari, M. Marco Frascari’s dream House. A theory of Imagination. Nueva York: Routledge, 2017. p. 29.

iii Sennett, Richard. El Artesano. Barcelona: Anagrama, 2009. p. 11.7

____________________________________________________________________



¡Únete!


¿Quieres colaborar con nosotros?


Contáctanos a través del formulario desde la sección Únete de nuestro sitio web, o consulta la convocatoria completa del próximo número que se encuentra ahí mismo.

Recuerda que está abierta a:

Arquitectos, diseñadores, artistas, poetas, escritores, dibujantes, fotógrafos y todos aquellos habitantes de este mundo que deseen expresar sus pensamientos.


Sin restricciones por nacionalidad o residencia.


Comments


© 2020-2025 by Ubicuo. Fanzine de arquitectura, diseños y artes

bottom of page